En medio de acusaciones generalizadas y de documentación que revela la profanación del Corán por parte de militares estadounidenses, el Pentágono realizó ayer una conferencia de prensa para responder a las acusaciones. Las fuerzas militares afirman que identificaron cinco incidentes que podrían describirse como “maltratos del Corán” por parte del personal estadounidense en la Bahía de Guantánamo. El Brigadier General Jay Hood no especificó la naturaleza del maltrato y se limitó a aclarar que el libro no había sido arrojado por el inodoro, contradiciendo la información de documentos secretos recientemente revelados. En uno de los documentos de 2002, revelado la semana pasada, un agente del FBI citaba a un recluso diciendo que los guardias habían arrojado el Corán por el inodoro. El General Hood expresó ayer que los investigadores militares entrevistaron al hombre en cuestión este mes, pero no le preguntaron si había visto a personal estadounidense arrojar el Corán por el inodoro. Escuchamos al General Jay Hood.
“En primer lugar, quiero que sepan que no encontramos pruebas fehacientes de que un miembro de las fuerzas conjuntas en Bahía de Guantánamo haya arrojado el Corán por el inodoro. Sin embargo, identificamos 13 incidentes de supuesto maltrato del Corán por parte del personal de las fuerzas conjuntas, 10 de los cuales implican a un guardia y otros tres a interrogadores. Descubrimos que solo cinco casos, que implican a cuatro guardias y a un interrogador, podrían definirse como profanación del Corán”
Escuchábamos al General Jay Hood hablando ayer en la conferencia de prensa en el Pentágono.