El príncipe Turki, al igual que Bandar Bush, es uno de los principales miembros de la familia real, se desempeñó como jefe de inteligencia saudí durante casi un cuarto de siglo y recientemente fue embajador en Londres. Su llegada a Washington podría causar controversia, ya que es una de las principales figuras saudíes que aparecen referidas en la demanda por 1 billón de dólares presentada por los familiares de las víctimas del 11 de septiembre, quienes sostienen que Turki ayudó a financiar la red de Osama bin Laden. Asimismo, el príncipe Turki se reunió personalmente con Bin Laden y sus tenientes en al menos cinco oportunidades. Describió a Bin Laden como “un hombre de voz suave” y “un hombre muy agradable”. The Times de Londres informó en 2002 que antes de los ataques del 11 de septiembre, fuentes diplomáticas dijeron que el gobierno saudí recibió mucha presión de Washington para reemplazar al príncipe Turki como jefe de inteligencia saudí debido a que en el pasado apoyaba y era asociado de Bin Laden.
Nuevo embajador saudí vinculado con 11 de setiembre y Bin Laden
Titular21 Jul. 2005