El general Michael Hayden compareció el jueves ante el Senado, para asistir al primer día de audiencias de confirmación que lo convertirían en el nuevo director de la CIA. El ex director de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés) defendió en reiteradas ocasiones la legalidad del programa secreto de escuchas telefónicas sin garnatías de la NSA, que él mismo ayudó a diseñar.
Hayden dijo: “A principios de octubre de 2001, cuando tuve que tomar esta decisión personal, y fue una decisión personal, las matemáticas eran bastante simples. No podía hacerlo… Sabíamos que este era un asunto serio, y que las medidas que estábamos tomando, aunque estábamos convencidos de que eran legales, las estábamos tomando en un régimen que era diferente del régimen que existió el 10 de septiembre”.
El general Hayden se negó a contestar preguntas durante la parte pública de la audiencia acerca de una serie de asuntos, que incluían los métodos usados en los interrogatorios, las prisiones secretas de la CIA, y el verdadero alcance del programa de vigilancia del gobierno.