La Corte Suprema causó un contratiempo a los informantes del gobierno. En una decisión de cinco votos contra cuatro, la corte declaró que la Constitución no siempre protege los derechos de libertad de expresión de los empleados del gobierno por lo que dicen sobre su trabajo. La corte sostuvo que los derechos de libertad de expresión de los funcionarios públicos están protegidos cuando hablan en carácter de ciudadanos sobre temas de interés público, pero no cuando hablan sobre sus funciones oficiales. El caso se centró en la degradación de un fiscal del Condado de Los Ángeles llamado Richard Ceballo. Ceballo demandó a la oficina de abogados de distrito del Condado de Los Ángeles cuando fue degradado de su cargo, tras revelar que un asistente del principal juez del distrito había mentido para obtener una orden de allanamiento.
Corte Suprema falla contra informantes del gobierno
Titular31 May. 2006