La crisis humanitaria en el Líbano continúa empeorando. Al menos 500.000 personas han sido desplazadas de sus hogares. Una gran cantidad de carreteras y puentes han sido destruidos, haciendo difícil el poder transportar comida o movilizar ayuda humanitaria. Los recientes ataques israelíes han tenido como objetivo la compañía productora de leche más grande del país, una de las principales fábricas de comida y dos plantas de productos farmacéuticos. Bombardeos anteriores habían tenido como blanco plantas de procesamiento de agua, plantas energéticas y silos de granos. El martes, un convoy de dos camiones que transportaban suministros médicos donados por los Emiratos Árabes Unidos fue golpeado por el ataque. Los camiones fueron destruidos, y ambos conductores murieron. Las Fuerzas Armadas israelíes han negado haber señalado a las fábricas o a los camiones de ayuda como blanco. Otras dos ambulancias también fueron bombardeadas el martes, cuando transportaban soldados libaneses que habían resultado heridos en un ataque israelí a su base, que había matado a once soldados. Un Iglesia Ortodoxa Griega también sufrió un ataque directo. Dentro de la iglesia se encontraban civiles que habían tratado de refugiarse. Al menos diez personas resultaron heridas.
Israel bombardea productora de leche, fábricas farmacéuticas, un convoy de ayuda y una iglesia
Titular19 Jul. 2006