Aumenta la preocupación en la Casa Blanca de que altos jerarcas del gobierno puedan ser juzgados en virtud de la Ley de Crímenes de Guerra de 1996. La ley penaliza las violaciones de las Convenciones de Ginebra y amenaza con aplicar la pena de muerte si prisioneros detenidos por Estados Unidos mueren en custodia debido al maltrato. El Washington Post informa que el Fiscal General Alberto Gonzáles habló en privado con legisladores republicanos acerca de la necesidad de proteger a los funcionarios del gobierno y a los soldados de ser juzgados por crímenes de guerra.
La Casa Blanca teme que funcionarios estadounidenses puedan ser juzgados en virtud de la Ley de Crímenes de Guerra
Titular31 Jul. 2006