Mientras tanto, padres libaneses también informan que sus hijos aún sufren por los 34 días de combate.
- Khattar Kheir-Eddine, un habitante libanés, dijo: “Los niños se asustan de todo luego de la guerra. Quedaron muy estresados. Se asustarían si se apagaran las luces o si escucharan algún ruido extraño en la casa. Han atravesado un estado psicológico muy difícil”.