En otras noticias, un aluvión de despidos de fiscales federales está suscitando nuevas acusaciones de que el gobierno de Bush está interfiriendo en el sistema judicial. En un caso controvertido, funcionarios del Departamento de Justicia le pidieron a la fiscal estadounidense de San Diego, Carol Lam, que renuncie. Los expertos legales dicen que esta acción es inaudita, ya que Lam nunca fue acusada de mala conducta mientras desempeñó su cargo. Lam supervisó el proceso por corrupción contra Duke Cunningham, el ex congresista republicano que fue encarcelado. Lam también evitó casos de delitos menores de contrabando en la frontera y se centró en la corrupción pública y los crímenes corporativos. Associated Press informa que al menos once fiscales estadounidenses han renunciado desde el año pasado, cuando se implementó una disposición poco transparente en la Ley Patriota de Estados Unidos que autoriza al Fiscal General estadounidense a designar nuevos reemplazos sin la confirmación del Senado. También se están suscitando críticas con respecto a esos nuevos reemplazos. En Arkansas, los dos senadores del Estado expresaron su preocupación luego que el gobierno postuló a un ex director de investigaciones para el Comité Nacional Republicano.
Despidos de fiscales estadounidenses por parte del Departamento de Justicia suscitan preocupaciones de interferencia en el sistema judicial
Titular18 Ene. 2007