En Jena, Louisiana, Mychal Bell, uno de los adolescentes del grupo de los denominados “Seis de Jena”, fue enviado nuevamente a prisión. El joven de 17 años de edad había estado preso durante diez meses por una pelea en el patio de un centro de educación secundaria, en la que él y otros cinco compañeros golpearon a un estudiante blanco. La pelea tuvo lugar luego de que estudiantes blancos colgaran tres sogas a modo de horcas en un árbol debajo del cual se habían sentado los adolescentes negros. Un jurado integrado en su totalidad por miembros blancos declaró culpable a Bell de agresión agravada en segundo grado. El joven fue liberado bajo fianza hace tan sólo dos semanas, luego de que un tribunal de apelaciones dictaminara que había sido juzgado incorrectamente como adulto. No obstante, el jueves el mismo magistrado que juzgó erróneamente a Bell —- el juez de Distrito J.P. Mauffrey— lo condenó a dieciocho meses de prisión por cargos pendientes de otro caso previo a la pelea. Bell fue condenado por dos cargos de agresión simple y dos cargos de vandalismo. El juez Mauffrey también ordenó que los padres de Bell pagaran todos los costos del juicio. Los abogados defensores habían intentado previamente que Mauffrey se recusara del caso de Bell.
En Irak, el Pentágono afirma que quince mujeres y niños y diecinueve presuntos insurgentes murieron en un ataque estadounidense en el norte de Bagdad. Se cree que este fue uno de los ataques estadounidenses simples en el que perecieron más civiles desde que comenzó la invasión.
Un nuevo informe de la ONU dice que Irak está inmerso en una “creciente crisis humanitaria”. Todos los meses miles de iraquíes huyen de sus hogares, se siguen cometiendo muchos asesinatos indiscriminados y la tortura en la prisión es sistemática. La Misión de Asistencia de la ONU para Irak descubrió que al menos cien civiles habían muerto en bombardeos o ataques dirigidos por Estados unidos durante un período de tres meses, contado hasta julio. Se cree que el número de muertos es aún mayor debido a que el gobierno iraquí se sigue negando a publicar la cifra oficial de muertos. El informe también advierte un incremento en la violencia contra las mujeres. En la región kurda del norte, más de 250 mujeres murieron en los llamados “asesinatos de honor” en la primera mitad del año. La mayoría de las víctimas fueron quemadas vivas. Este duro informe representa un marcado contraste con las declaraciones que altos funcionarios estadounidenses en Irak hicieron el mes pasado ante el Congreso. El Washington Post informa que la ONU finalizó su estudio en agosto, pero postergó su publicación a pedido del embajador estadounidense Ryan Crocker. El embajador fue uno de los funcionarios que prestó declaración ante el Congreso.
Sigue surgiendo evidencia de que el asesinato del mes pasado de al menos diecisiete civiles iraquíes —perpetrado por guardias de Blackwater— fue injustificado. Según el Washington Post, un informe publicado recientemente que fue compilado por los soldados estadounidenses que llegaron primero a la escena del crimen, sostiene que no se halló evidencia que indicara que los iraquíes le habían disparado al convoy de Blackwater. Los soldados también concluyeron que los guardias de la contratista militar continuaron disparándole a los civiles iraquíes mientras éstos intentaban huir del lugar. Dos vehículos civiles habían recibido impacto de balas en el parabrisas trasero, pero no en el delantero, lo que indica que les dispararon mientras se alejaban. Otro nuevo detalle es que el vehículo en el viajaban una médica y su hijo ni siquiera había ingresado a la rotonda de la Plaza Nisoor desde donde los guardias de Blackwater abrieron fuego. Los soldados concluyeron que no hubo ninguna “actividad enemiga implicada” en lo que calificaron como un “incidente criminal”. Este informe surge mientras un sobreviviente del tiroteo y los parientes de tres de los iraquíes que fallecieron presentaron una demanda contra Blackwater en tribunales estadounidenses.
Mientras tanto en Afganistán, el Washington Post informa que el gobierno de ese país ha clausurado dos empresas militares privadas locales. El gobierno presuntamente se está preparando para cerrar otras diez empresas, que incluyen a por lo menos dos grandes firmas occidentales. Blackwater y DynCorp International son sólo dos de las docenas de empresas de seguridad privadas que operan en Afganistán.
El Consejo de Seguridad de la ONU emitió la primera resolución en la que critica la represión de la Junta Militar birmana contra el levantamiento popular a favor de la democracia.
Turquía llamó a su embajador en Estados Unidos para efectuar consultas sobre la votación de un panel del Congreso que busca reconocer el genocidio armenio. El Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes aprobó la medida esta semana, a pesar de la fuerte oposición de la Casa Blanca. El jueves, funcionarios del gobierno prometieron esforzarse para lograr que el proyecto de ley sea rechazado cuando se someta a votación en la Cámara de Representantes.
Turquía prometió que Estados Unidos afrontaría serias consecuencias si la medida es aprobada por la Cámara de Representantes.
Mientras tanto en Turquía, el hijo y un colega del periodista turco de origen armenio que fue asesinado, Hrant Dink, fueron condenados con beneficio a libertad condicional por escribir sobre el genocidio armenio. Arat Dink y Sarkis Seropyan fueron hallados culpables de insultar a la nación turca.
Hrant Dink fue asesinado frente a su oficina en enero, en lo que según muchos fue un asesinato político por sus esfuerzos por cuestionar a Turquía por negarse a reconocer el genocidio armenio.
Un nuevo estudio del grupo de ayuda internacional Oxfam International dice que al continente africano las luchas internas le han costado más de 285.000 millones de dólares desde el año 1990. Oxfam afirma que estos hallazgos evidencian la necesidad de un control de armas más estricto, ya que la mayoría del armamento de África es importado.
El Director de la CIA, Michael Hayden, ordenó lo que es considerado una investigación sin precedentes sobre el principal funcionario de vigilancia de la CIA. El Inspector General John Helgerson emitió varios informes que critican el programa de detención e interrogatorio de la CIA. Los críticos temen que la investigación pueda ser un intento por ponerle un freno. Muchos creen que impedirá que los funcionarios de la CIA cooperen con Helgerson en el futuro por temor a ser reprendidos. El ex inspector de la CIA Frederick Hitz dijo que esta investigación era una “pésima idea”.
Más de dos docenas de grupos iraníes estadounidenses y de derechos humanos le están solicitando al Congreso que reduzca o elimine aproximadamente setenta millones de dólares destinados a promover la democracia en Irán. La coalición dice que la financiación estadounidense ha sido contraproducente y ha debilitado sus esfuerzos para una reforma. En una declaración, el grupo dice: “Los reformadores iraníes creemos que la democracia no puede ser importada y debe basarse en instituciones y valores autóctonos. En general los presuntos beneficiarios de los fondos censuran el programa”. Esta carta fue difundida por el Consejo Nacional Iraní Estadounidense, la Alianza de Defensa Conservadora Estadounidense y el Centro para el Control de Armas y la No Proliferación.
El ex Vicepresidente estadounidense Al Gore y el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de la ONU recibieron el Premio Nóbel de la Paz de 2007 por sus esfuerzos por concientizar a la población sobre la amenaza del calentamiento global.
El ex Presidente estadounidense Jimmy Carter acusó al gobierno de Bush de utilizar la tortura, y por lo tanto de violar el Derecho Internacional. Carter realizó estos comentarios durante una entrevista con Wolf Blitzer, de la CNN.
Carter también habló sobre las elecciones presidenciales del año 2008, calificando al ex alcalde de Nueva York Rudi Giuliani de “tonto” por respaldar un posible ataque estadounidense contra Irán. El ex mandatario también criticó a los senadores Hillary Clinton de Nueva York y Barack Obama de Illinois por negarse a comprometerse a retirar a todos los soldados estadounidenses de Irak antes del año 2012. No obstante, Carter guardó sus críticas más duras para el Vicepresidente Dick Cheney. En una entrevista con BBC News al día siguiente, Carter calificó a Cheney de “militante”, y dijo que era un desastre para su país.