Surgió un nuevo video con testimonios de los sobrevivientes de la represión de la Junta birmana contra un levantamiento popular. Investigadores de Amnistía Internacional entrevistaron a docenas de testigos y víctimas a lo largo de la frontera entre Tailandia y Birmania. A continuación citaremos el relato de un monje no identificado.
- El monje anónimo dijo: “Algunos de los heridos estaban tan ensangrentados que no se podía ver de dónde venía la sangre. Algunos de los monjes perdieron la parte superior de sus hábitos. Vi a civiles tratando de ayudar a un monje herido. La mayoría de las heridas eran en la cabeza. La policía antidisturbios apuntaba a la cabeza”.
Los investigadores también hablaron con el activista a favor de la democracia Hlaing Moe Than.
- Hlaing Moe Than dijo: “Hay aproximadamente 1.450 prisioneros y cerca de 500 de ellos tienen heridas en la cabeza. Necesitan atención médica de inmediato. No había suficiente asistencia médica. No había agua potable ni baños. Ni uno solo. Algunos monjes fueron desnudados a la fuerza. Les dieron ropa de civiles, pero los monjes no querían usarla, por lo tanto permanecieron con la parte superior de su cuerpo al desnudo. Me dijeron que la situación era realmente mala”.