En Capitol Hill, los senadores republicanos bloquearon un proyecto de ley demócrata para financiar la guerra de Irak que hubiera exigido que los soldados comenzaran a retirarse dentro de 30 días y establecido el objetivo de poner fin al combate antes de fines del año 2008. El Líder de la
Mayoría del Senado, Harry Reid, dijo: “Este proyecto de ley exige que el Presidente comience a traer a los soldados de regreso a Estados Unidos para que puedan ser recibidos como héroes, que es lo que se han ganado con tanto valor. Nuestra medida establece como objetivo razonable poner fin a las operaciones de combate. Y finalmente asegura que el Presidente le rinda cuentas al Congreso y al pueblo”. La votación definitiva del proyecto de ley de financiamiento fue de 53 votos contra 45. A los demócratas les faltaron siete votos para llegar a los 60 necesarios para aprobar la medida.
La Senadora republicana de Carolina del Sur, Lindsey Graham, dijo: “Eso es ridículo. Está socavando los intereses esenciales de seguridad nacional de Estados Unidos. Y le está diciendo a nuestros soldados ‘son unos perdedores’, cuando en realidad son ganadores. Por lo tanto, vamos a rechazarlo ahora y siempre”.