Aparentemente el gobierno de Bush dio su apoyo tácito a la suspensión de la Constitución y la represión de miles de opositores del gobierno liderada por el Presidente pakistaní, el general Pervez Musharraf. El sábado Musharraf reemplazó al presidente de la Corte Suprema de Pakistán y declaró un estado de emergencia, alegando un aumento de los ataques militares en el país. No obstante, esta acción tuvo lugar solo días antes de que la Corte Suprema de Pakistán emitiera un fallo con respecto a si su reelección del mes pasado había sido legal. Se calcula que 1.800 personas han sido arrestadas, entre ellas líderes, abogados y activistas por los derechos humanos disidentes. La líder de la oposición y ex Primera Ministra Benazir Bhutto condenó lo que calificó de “ley marcial”.
La Secretaria de Estado Condoleezza Rice dice que Estados Unidos reconsiderará la ayuda anual a Pakistán de 150 millones de dólares. Sin embargo, el New York Times informa que altos funcionarios pakistaníes afirman que la reacción de la Casa Blanca fue “silenciosa”, y que prevén que no habrá “consecuencias”. Ni el Presidente Bush ni ningún alto funcionario estadounidense ha llamado a Musharraf para expresarle su disconformidad. El Ministro de Información pakistaní, Tariq Azim Khan, dijo: “Ellos preferirán tener un Pakistán estable, aunque con algunas normas restrictivas, que tener más democracia propensa a caer en las manos de los extremistas. Si se les diera la opción, sé lo que nuestros amigos elegirían”.
En Irak, el año 2007 va camino a convertirse en el más letal para los soldados estadounidenses desde que comenzó la invasión, hace más de cuatro años. Según Associated Press, al menos 847 miembros de las Fuerzas Armadas estadounidenses han perdido la vida en Irak este año. A menos de dos meses de que termine el año, es la segunda cifra anual más alta de la ocupación de Irak.
En Estados Unidos, aparentemente el aspirante a Fiscal General Michael Mukasey logrará su confirmación luego de que tres destacados senadores anunciaron que apoyarán su nombramiento. Este fin de semana, los miembros del Comité Judicial del Senado Arlen Specter de Pensilvania, Charles Schumer de Nueva York y Dianne Feinstein de California dijeron que apoyarán a Mukasey a pesar de que se negó a afirmar que la técnica conocida como “el submarino” es una forma de tortura. Schumer y Feinstein dijeron que apoyan a Mukasey en parte para estabilizar al Departamento de Justicia que actualmente no tiene Fiscal General, y para evitar nombramientos provisorios.
Mientras tanto, nueva evidencia sugiere que el gobierno de Bush obligó a renunciar a un alto funcionario del Departamento de Justicia que declaró que “el submarino” era una forma de tortura, luego de haberlo experimentado en persona. Según ABC News, el ex Vicefiscal General interino Dan Levin estaba tan preocupado por la aprobación de la Casa Blanca de “el submarino” que en el año 2004 fue a una base militar para experimentar la técnica él mismo. En ese momento a Levin se le había asignado la tarea de reelaborar la postura legal del gobierno con respecto a la tortura. Levin concluyó que “el submarino” probablemente es una técnica ilegal de tortura a menos que sea aplicada de forma limitada y bajo estricta supervisión. Estos hallazgos serían incluidos en un memorando que expondría la nueva postura del gobierno sobre la tortura. No obstante, Levin nunca logró concluir su informe porque fue forzado a renunciar.
En Guatemala, el candidato presidencial centrista Álvaro Colom obtuvo una victoria electoral sorpresiva sobre el ex general del Ejército Otto Pérez Molina. Hasta la semana pasada, el general Pérez Molina había sido consagrado como el ganador en las encuestas de opinión. Pérez Molina comandó soldados en una de las áreas más violentas de Guatemala, y ha estado implicado en muchos crímenes políticos. Las elecciones estuvieron marcadas por la violencia y más de cincuenta colaboradores de campaña y candidatos fueron asesinados antes de la primera vuelta, realizada el pasado mes de septiembre.
80.000 personas siguen atrapadas por las inundaciones en la costa sureña del Golfo de México. Diez personas han muerto desde la semana pasada, cuando se desbordaron varios ríos que destruyeron los hogares de 500.000 personas. El Estado de Tabasco es el más damnificado, con el 80% del territorio bajo agua. El Gobernador de Tabasco, Andrés Granier, pidió ayuda internacional.
En Venezuela, partidarios y opositores de la propuesta del Presidente Hugo Chávez de realizar una serie de cambios a la Constitución salieron a las calles este fin de semana en grandes masas. El plan de Chávez incluye eliminar los plazos límites del mandato presidencial, incrementar las facultades ejecutivas durante un estado de emergencia y recortar las horas de trabajo de ocho a seis. Las propuestas serán sometidas a referéndum el mes que viene. El sábado, decenas de miles de opositores protestaron contra Chávez en una manifestación realizada en Caracas. El líder de la oposición Oscar Pérez prometió que los planes de Chávez afrontarán una fuerte resistencia.
Al día siguiente de las manifestaciones del sábado, cientos de miles de partidarios de Chávez se congregaron en las calles. El Ministro de Energía venezolano, Rafael Ramírez, habló ante la multitud.
El referéndum de Venezuela se llevará a cabo el 2 de diciembre.
Mientras tanto, el Vicepresidente Dick Cheney cometió un error este fin de semana cuando intentó criticar a Chávez durante un discurso en Dallas, en el que confundió a Venezuela con Perú.
Ni Cheney ni el público presente corrigió esta declaración.
En Somalia, casi 90.000 personas han huido de Mogadiscio, la capital del país, desde que se intensificó la violencia la semana pasada. Los soldados etíopes continúan llegando al país para luchar contra los militantes islamistas. Trabajadores de ayuda dicen que la nueva ola de refugiados está provocando una crisis en los campos superpoblados. Una residente de Mogadiscio que fue desplazada, Faduma Hassan Geelle, describió el calvario que vivió.
Sanciones estadounidenses obligan al Banco Mundial a suspender la ayuda a Irán El Banco Mundial se vio obligado a suspender el financiamiento de ayuda a Irán a raíz de las nuevas sanciones del gobierno de Bush contra este país. Los funcionarios del Banco Mundial dicen que suspendieron más de cinco millones de dólares en pagos de ayuda para terremotos, saneamiento y otros proyectos.
En otras noticias de Estados Unidos, nuevas encuestas siguen indicando una disminución en al apoyo al Presidente Bush y a la invasión de Irak. Según el Washington Post y ABC News, menos de una cuarta parte de la población piensa que el país va por buen camino. Seis de cada diez estadounidenses consideran que la guerra de Irak no valía la pena. El viernes, el Presidente Bush desestimó los resultados de las encuestas, y prometió continuar con la ocupación.
En materia electoral, el candidato presidencial republicano Fred Thompson está a la defensiva luego de que se reveló que uno de sus principales recaudadores de fondos tiene un historial como traficante de drogas y jugador compulsivo. El Washington Post reveló este fin de semana que el copresidente de campaña de Thompson, Phillip Martin, se declaró culpable de cargos de tráfico de cocaína y conspiración en 1983. Thompson ha utilizado el avión privado de Martin durante su campaña, y afirma que no estaba al tanto del pasado criminal de su recaudador.
Los guionistas de televisión y cine del país comenzaron una huelga en el día de hoy, luego de que fracasaron las negociaciones con los productores de la industria del entretenimiento. El Gremio de Escritores de Hollywood, que representa a 12.000 escritores, está solicitando indemnizaciones por su trabajo, que aparece en nuevos medios de comunicación como Internet. La última huelga de escritores duró casi seis meses, y se produjo en el año 1988.
Y el movimiento de base ambientalista Step It Up llevó a cabo su segundo Día Nacional de Acción por el Clima este fin de semana, cuando se realizaron más de 1.400 eventos en los cincuenta estados para exigir la reducción de las emisiones de dióxido de carbono de Estados Unidos en un 80% para el año 2050; la creación de millones de nuevos “trabajos verdes” y una moratoria de las plantas energéticas alimentadas con carbón. Entre las personas que hablaron en las manifestaciones de todo el país se encontraban la madre por la paz Cindy Sheehan en San Francisco y el candidato presidencial demócrata John Edwards, en Nueva Orleáns.