En Líbano, un médico belga que sobrevivió a un largo secuestro en Líbano hace dos décadas regresó para llamar la atención sobre los efectos del uso de bombas racimo por parte de Israel. El médico, Jan Cools, pasó trece meses secuestrado desde 1988. El jueves, Cools solicitó una prohibición a las bombas racimo y dijo que Israel debería indemnizar a Líbano por haber lanzado cientos de miles de bombas racimo durante su ataque del año pasado.
- Jan Cools dijo: “Creo que es positivo que las minas sean eliminadas, nadie puede afirmar lo contrario, y los belgas son muy buenos haciendo eso. Y se puede plantear la pregunta, ¿quién va a pagar por esto? Este es uno de los reclamos que planteamos. Consideramos que los israelíes deben pagar el costo de eliminar las bombas racimo. También podemos pedirle a Israel que pague dinero para la reconstrucción de Líbano”.
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