El Presidente Bush impuso nuevas sanciones al gobierno sudanés por la crisis humanitaria en Darfur. Estados Unidos prohibirá al menos a treinta empresas sudanesas operar en su territorio, e impondrá sanciones a dos funcionarios del gobierno y a un líder rebelde.
- El Presidente Bush dijo: “Solicito al Presidente Bashir que detenga su obstrucción y que permita el ingreso de las fuerzas de paz, y que ponga fin a la campaña de violencia que continúa afectando a hombres, mujeres y niños inocentes. Y le prometo esto al pueblo de Darfur: Estados Unidos no le dará la espalda a la crisis que desafía la conciencia del mundo”.
El gobierno también dice que procurará que se tomen acciones más severas en el Consejo de Seguridad de la ONU, e incluso se plantea un embargo de armas contra el gobierno sudanés. Alrededor de 200.000 personas murieron y dos millones y medio fueron desplazadas, en lo que el gobierno de Bush describe como un genocidio. El gobierno chino encabeza los pedidos contra las sanciones a su principal socio petrolero.
- El enviado chino en Darfur, Liu Guijin, dijo: “La esencia del problema de Darfur no es el llamado genocidio, sino que surge de los conflictos entre diferentes partes por el agua y la tierra provocados por la pobreza y un estatus menos desarrollado. Se debe a la escasez de recursos. Por lo tanto es un problema de desarrollo. Si la comunidad internacional sinceramente espera ayudar a resolver el problema de Darfur al igual que otros problemas en África, debería proporcionar más ayuda para el desarrollo junto con la ayuda humanitaria”.