En Estados Unidos, se fijó la fecha de ejecución para un prisionero afroestadounidense en Georgia para este mes, a pesar de varios cuestionamientos alrededor de su procesamiento. Troy Davis fue procesado por asesinar a un policía que no estaba de servicio en 1989. Amnistía Internacional defendió su caso argumentando que no hay pruebas materiales que lo vinculen a la muerte del policía. Siete de los nueve testigos del procesamiento retiraron sus declaraciones desde entonces, las cuales habían sido utilizadas para procesarlo por homicidio. Los miembros del jurado desconocían además que varios testigos firmaron declaraciones juradas bajo presión policial, e incluso uno de los testigos llegó a aseverar que no leyó lo que firmó.
Se fijó fecha de ejecución para prisionero negro a pesar de que testigos declararon bajo coerción y se retractaron de sus dichos
Titular06 Jul. 2007