El gobierno de Bush anunció un nuevo plan para nacionalizar parcialmente el sistema bancario de Estados Unidos mediante la inversión de 250 mil millones de dólares en las instituciones financieras del país. El Presidente Bush anunció esta medida en la Casa Blanca
El Presidente Bush dijo: “El gobierno federal utilizará una parte del plan de rescate financiero de 700 mil millones de dólares para inyectar capital en los bancos mediante la compra de acciones ordinarias. Este capital ayudará a los bancos que no afrontan dificultades a seguir dando préstamos a las empresas y a los clientes, y este capital también ayudará a los bancos en problemas a tapar el agujero creado por las pérdidas durante la crisis financiera, para que puedan reanudar los préstamos y ayudar a fomentar la creación de nuevos puestos de trabajo y el crecimiento económico”.
Nueve de los mayores bancos estadounidenses se verán obligados a aceptar la propiedad parcial del gobierno. Entre estos bancos se encuentran el Citigroup, Bank of America, Wells Fargo, Goldman Sachs y JP Morgan Chase. El gobierno asegurará los depósitos de las cuentas sin intereses y ciertos tipos de deudas bancarias. El Secretario del Tesoro, Henry Paulson, dijo que esta medida es necesaria para reactivar la economía.
El Secretario del Tesoro, Henry Paulson, dijo: “Hoy estamos tomando medidas decisivas para proteger la economía de Estados Unidos. Lamentamos tener que tomarlas. Estas medidas no son lo que hubiéramos deseado, pero debemos tomarlas para reestablecer la confianza en nuestro sistema financiero”.