El fin de semana el senador John McCain y la gobernadora Sarah Palin pintaron varias veces a Barack Obama como un socialista. En su discurso radial semanal, McCain dijo: “Al menos en Europa, los líderes socialistas que tanto admiran a mi opositor son sinceros acerca de sus objetivos”. Palin dijo que el plan impositivo de Obama “se parece un poco al socialismo”.
En un evento de la campaña en Westerville, Ohio, John McCain sugirió que Barack Obama tiene una agenda económica oculta.
El senador John McCain dijo: “Tras meses de elocuencia en la campaña, finalmente nos enteramos cuál es la meta económica de Obama. Le dijo a Joe que quiere 'repartir la riqueza'. Repartir la riqueza. Cree en redistribuir la riqueza; no en políticas que hagan crecer nuestra economía y generen puestos de trabajo y oportunidades para todos los estadounidenses. El senador Obama está más interesado en controlar quién se queda con su trozo del pastel, que en hacer que el pastel crezca”.
En un evento ante más de cien mil seguidores en St. Louis, Missouri, Barack Obama defendió su plan impositivo.
Obama dijo: “John McCain está tan lejos de las luchas que ustedes están enfrentando… debe ser el primer político de la historia en catalogar un recorte de impuestos a los trabajadores como una 'política de bienestar'. Bueno, déjenme decirles, la única política de bienestar en esta campaña es el plan de John McCain de darles otros 200 mil millones en recortes de impuestos a las compañías más pudientes de Estados Unidos, incluyendo cuatro mil millones en recortes a las grandes empresas petroleras que tuvieron ganancias record en el gobierno de George Bush. Por ellos es por quien lucha John McCain. Yo estoy luchando por ustedes. Y nosotros no podemos soportar cuatro años más de lo que tuvimos los últimos ocho”.