En Long Island, Nueva York, se reunieron más de 500 personas el sábado para asistir al funeral del inmigrante ecuatoriano que fue hostigado y asesinado a puñaladas en Patchogue, Nueva York. Marcelo Lucero, de 37 años de edad, falleció la semana pasada, luego de ser atacado a puñaladas. La policía dijo que Lucero fue agredido por ser latino. Siete hombres blancos jóvenes fueron acusados de agresión en grupo y arrestados. Uno de ellos, Jeffrey Conroy, también ha sido acusado de homicidio culposo en primer grado como delito racial. La policía dijo que Conroy hirió de muerte a Lucero al hundirle un cuchillo en el pecho. El viernes, 900 personas asistieron al funeral al aire libre. Entre los oradores estuvo Carlos Rodas, activista en favor de los derechos de los inmigrantes.
Rodas dijo: “Esta noche toda la comunidad hispana se reúne para lamentar la muerte violenta de uno de nuestros miembros, un latino, un ecuatoriano, que al igual que muchos de nosotros dejó su país con muchas esperanzas y sueños para venir a este gran país en busca del sueño americano”.