En Líbano, el líder de Hezbolá Sayyed Hassan Nasralá amenazó a Israel con una “guerra abierta”, tras el asesinato de un alto comandante militar de esta organización. Hezbolá acusó a Israel de ser el responsable del atentado con coche bomba que causó la muerte de Imad Moughniyah en Siria, a principios de esta semana. El jueves, Nasralá habló mediante una videoconferencia en un funeral masivo en Beirut.
Sayyed Hassan Nasralá dijo: “Hoy diré algo sobre este crimen, en este lugar, en este momento, y de esta manera. Ustedes, sionistas, si quieren que sea una guerra de este tipo, entonces que el mundo entero escuche, que sea una guerra abierta”.
Israel negó estar vinculado, pero recibió con agrado la noticia de la muerte de Moughniyah, quién había sido buscado por Israel y Estados Unidos por su presunta participación en varios ataques contra blancos occidentales, en Líbano y en el extranjero. El funeral se realizó luego de que multitudes llevaron a cabo otra manifestación en el centro de Beirut para conmemorar el tercer aniversario del asesinato del ex Primer Ministro Rafik Hariri.