La Reserva Federal tomó medidas drásticas anoche en varios frentes, para evitar una crisis del sistema financiero mundial. El domingo la Reserva Federal ayudó a JPMorgan a comprar el banco de inversión Bear Stearns en un esfuerzo por salvar al quinto mayor banco de inversión de la quiebra. La Reserva anunció un recorte de emergencia de un cuarto de punto porcentual en su tasa de descuento. También aceptó convertirse en el prestamista de último recurso de otros bancos de inversión, en un esfuerzo por evitar que estas empresas vayan a la quiebra. El Wall Street Journal informa que esta fue una de las mayores expansiones de la autoridad de préstamo de la Reserva Federal desde la década del 30. La caída de Bear Stearns ha impactado a la comunidad empresarial. JPMorgan compró la firma por tan sólo 270 millones de dólares, mientras que hace un año Bear Stearns valía veinte mil millones de dólares. Como parte del acuerdo, la Reserva Federal acordó prestarle a JPMorgan treinta mil millones de dólares para asegurar algunas de las inversiones hipotecarias de Bear Stearns. Si los activos pierden valor, los contribuyentes estadounidenses pagarán el precio. La ayuda económica del gobierno es la primera de este tipo desde la Gran Depresión. En respuesta a la compra de Bear Stearns, los mercados bursátiles en Asia y Europa se desplomaron. Mientras tanto el precio del petróleo llegó a niveles sin precedentes, casi 112 dólares el barril.
La caída de Bear Stearns sacude la economía mundial
Titular17 Mar. 2008