Mientras tanto, aún no se sabe cuántas personas murieron en el bombardeo estadounidense del miércoles contra la localidad de Hilla. Los testigos reportaron entre diez y ochenta muertes. Un residente local afirmó que Hilla no había sido utilizada para desarrollar actividades insurgentes.
El residente de Hilla dijo: “¿Cuál es el motivo para atacarnos? Nosotros no luchamos contra ellos ni atacamos una estación de policía o una base militar. No amenazamos a nadie ni participamos en manifestaciones. No hubo acciones militares en nuestra área”.