En Canadá, el gobierno pidió disculpas formalmente por obligar a cientos de miles de niños indígenas a asistir a escuelas residenciales. Durante décadas, y entrado el siglo veinte, los niños indígenas fueron retirados de sus hogares y obligados a asistir a escuelas administradas por la iglesia donde fueron maltratados y padecieron enfermedades. El miércoles, el Primer Ministro canadiense Stephen Harper leyó una larga disculpa ante el parlamento.
El Primer Ministro canadiense, Stephen Harper, dijo: “Han estado trabajando en recuperarse de esta experiencia durante mucho tiempo y en un sentido verdadero los acompañamos en esta travesía. El gobierno de Canadá pide disculpas sinceras y pide perdón a los pueblos aborígenes de este país por haberles fallado tan profundamente”.
Una comisión formal de verdad y reconciliación sobre las escuelas comenzó a trabajar este mes.