Mientras tanto legisladores de la Unión Europea acordaron que los inmigrantes indocumentados pueden ser detenidos durante un máximo de 18 meses, y afrontar una prohibición de hasta cinco años de volver a ingresar. Nicholas Beger, de Amnistía Internacional, indicó que los grupos de derechos humanos tenían graves preocupaciones ante estas normas.
Nicholas Beger dijo: “Esta es una gran preocupación para Amnistía Internacional. Quiero decir que Amnistía Internacional está básicamente en contra de la detención de menores y con esta directiva, además de no prohibir la detención, no se especifica que los menores no pueden estar detenidos en prisiones. Podría haber niños de 12 años detenidos en prisiones para adultos sin protección en cuanto a su condición”.