En Líbano, cinco ex militantes fueron recibidos con una gran concentración el miércoles en Beirut, tras ser liberados de las prisiones israelíes. Estas cinco personas fueron liberadas como parte de un intercambio de prisioneros en el cual Israel también entregó los restos de aproximadamente 200 militantes, a cambio de los cuerpos de dos soldados israelíes. En una aparición pública inusual, el líder de Hezbolá, Hassan Nasralá, afirmó que el intercambio era una gran victoria.
Hassan Nasralá dijo: “Como dijimos en el año 2000, la era de la derrota quedó atrás y comenzó la era de la victoria. Este pueblo, esta nación, este país le ha enviado hoy un mensaje claro al mundo, tanto a los amigos como a los enemigos, que no puede ser derrotado”.
Más de diez mil prisioneros palestinos y libaneses continúan detenidos en cárceles israelíes. Israel atacó Líbano en el verano de 2006, con el pretexto de rescatar a soldados israelíes tras su captura durante una operación de Hezbolá. En una entrevista con Al Jazeera, Robert Fisk, corresponsal del periódico The Independent de Londres, dijo: “Sin duda los israelíes perdieron esa guerra, no recuperaron a sus prisioneros, no hasta ahora, y los están recuperando muertos… Más de mil civiles libaneses y más de 160 israelíes, en su mayoría soldados, murieron por nada, y el intercambio de prisioneros de hoy lo demuestra”.