El martes, las fuerzas rusas tomaron a ocho soldados georgianos como prisioneros luego de que se negaron a permitir que los vehículos blindados rusos ingresaran al puerto de Poti. Los soldados rusos también destruyeron uno de los buques navales más sofisticados de Georgia y tomaron cuatro vehículos militares Humvee estadounidenses que recientemente habían sido utilizados en ejercicios de entrenamiento. El Ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, criticó las acciones de la OTAN.
Lavrov dijo: “Parece que la OTAN está intentando convertir al agresor en víctima y encubrir un régimen criminal, salvar un régimen al borde del colapso, y va camino al rearme de los actuales líderes de Georgia”.