El gobierno estadounidense tomó el control de las empresas hipotecarias Fannie Mae y Freddie Mac, en lo que podría convertirse en la mayor ayuda gubernamental al sector empresarial de la historia. El Departamento del Tesoro prometió entregarle 200.000 millones de dólares a las empresas mientras lidian con grandes pérdidas debido a las moras hipotecarias. Estas dos empresas públicas dirigidas por particulares poseen o garantizan prácticamente la mitad de los 12 billones de dólares en deudas hipotecarias del país. El Secretario del Tesoro, Henry Paulson, anunció la ayuda del gobierno.
Henry Paulson dijo: “Fannie Mae y Freddie Mac son tan grandes y están tan ligadas a nuestro sistema financiero, que la quiebra de cualquiera de las dos causaría un gran trastorno en los mercados financieros, aquí en este país y en todo el mundo. Este trastorno tendría un impacto directo y negativo en la economía familiar, desde el presupuesto familiar hasta el valor de las viviendas, los ahorros para financiar los estudios y las jubilaciones…”.
El candidato presidencial republicano y el demócrata, John McCain y Barack Obama, apoyaron la ayuda gubernamental. Obama dijo que el gobierno debe tomar medidas para evitar que a la larga Fannie Mae y Freddie Mac se aprovechen de la ayuda del gobierno.
El Senador Obama dijo: “Debemos proteger a los contribuyentes, no ayudar a los accionistas y al directorio de Fannie Mae y Freddie Mac. Es una situación difícil, que ha ido empeorando con el tiempo. Hay algunos bancos comunitarios y regionales que están en riesgo, entre ellos esos bancos que ayudan a las comunidades de bajos ingresos. Vamos a tener que tratar esas situaciones con mucho cuidado, pero no debemos permitir la intervención del gobierno para proteger a los inversores y especuladores que dependen del gobierno para obtener grandes ganancias”.