En otras noticias de Asia, Sri Lanka solicitó a Estados Unidos que detenga el interrogatorio programado a su jefe de defensa sobre eventuales violaciones a los derechos humanos y crímenes de guerra cometidos por ese país durante la guerra contra los Tigres del Tamil. El general Sarath Fonseka, comandante del Ejército, se encuentra actualmente en Estados Unidos visitando a sus hijas.
El ministro de Relaciones Exteriores de Sri Lanka, Rohitha Bogollagama, declaró: “En primer lugar, toda información que el general Fonseka haya recabado en el ejercicio de sus deberes oficiales es confidencial por naturaleza. Por lo tanto, legalmente no puede ser revelada a terceros sin la previa aprobación y consentimiento de las autoridades de Sri Lanka. La cuestión referida tiene serias implicancias para la seguridad y bienestar del pueblo de Sri Lanka y su gobierno no autorizará, bajo ninguna circunstancia, un acto ilegal de ese tipo. Sri Lanka enfrenta presiones crecientes por su actuación relativa a los derechos humanos”.
El mes pasado, la Oficina de la Alta Comisionada por los Derechos Humanos de la ONU sugirió una investigación externa en Sri Lanka, similar a la propuesta para los crímenes de guerra de Gaza.