El martes, el Presidente Obama reconoció la existencia de una falla en el sistema de seguridad del país. Obama también reveló que Estados Unidos había reunido inteligencia sobre un posible ataque y que las agencias gubernamentales no compartieron la información crucial.
El Presidente Obama declaró: “Cuando nuestro gobierno tiene información sobre un conocido extremista y esa información no se comparte y no se hace nada con ella, de modo tal que este extremista sube a un avión con explosivos peligrosos que podrían haber terminado con 300 vidas, ha ocurrido una falla del sistema y considero que eso es absolutamente inaceptable. Las revisiones que ordené seguramente nos dirán más, pero lo que ya es claro es que hubo una combinación de errores humanos y del sistema que contribuyeron a esta potencial y catastrófica brecha de seguridad”.