En Canadá, la caza anual de focas comenzó a pesar de las crecientes críticas de organizaciones en defensa de los derechos de los animales. El gobierno canadiense anunció que los cazadores podrán matar 280.000 crías de focas polares del norte, un ligero aumento con respecto a la cantidad autorizada el año pasado. Si bien se utilizan armas de fuego para matar a la mayoría de los animales, algunos son ultimados a golpes con garrotes con puntas. La presión internacional está aumentando para detener la caza de focas. La semana pasada, Rusia prohibió la caza de crías de focas polares del norte, semanas después de que el Primer Ministro Vladimir Putin la calificara de “industria sangrienta”. El Ministro de Recursos Naturales de Rusia calificó a la caza de focas como “uno de los tipos más inhumanos de caza del mundo”.
Caza de focas canadiense enfrenta críticas
Titular24 Mar. 2009