El gobierno sudanés está amenazando con expulsar a más grupos de ayuda extranjeros, a diplomáticos y fuerzas de paz días después de que la Corte Penal Internacional ordenara el arresto del Presidente sudanés Omar Hassan al-Bashir por cometer crímenes de guerra. Sudán ya expulsó a 13 de los mayores grupos de ayuda que operaban en Darfur. Ann Veneman de UNICEF, condenó al gobierno sudanés.
Ann Veneman dijo: “Hay millones de personas en Darfur que dependen de la ayuda humanitaria, para recibir alimento, asistencia médica, vacunas, educación, y la verdadera preocupación es cómo llenar ese vacío cuando se revocaron los permisos de tantas organizaciones, que representan probablemente unas dos mil o más personas”.
El Embajador de Sudán ante la Organización de las Naciones Unidas, Abdalmahmoud Abdalhaleem, acusó a los grupos de ayuda de intentar desestabilizar a Sudán.
Abdalmahmoud Abdalhaleem dijo: “No deberían cuestionar la sabiduría de nuestro gobierno. No hizo eso al azar. Hemos estado trabajando con estas organizaciones durante mucho tiempo. Les habíamos advertido. Les habíamos dicho que no continuaran en ese camino de desestabilización, pero decidieron hacerlo. No solamente eso, sino que también están desarrollando actividades incompatibles con su función humanitaria. Están estropeando todo en lo que refiere a la seguridad y estabilidad de los respectivos estados de Darfur”.
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