En Irán, cientos de miles de personas marcharon en Teherán el lunes, para protestar contra las cuestionadas elecciones presidenciales de la semana pasada. A pesar de la prohibición oficial que rige para las protestas, el líder de la oposición, Mir Hussein Moussavi, se unió a la multitud, en lo que fue descripto como la mayor manifestación antigubernamental en Irán desde la Revolución Iraní de 1979. Anoche hubo un giro violento en las protestas, en las que habrían muerto siete personas, según se informa. Mientras tanto, el poderoso Consejo de Guardianes de Irán afirma que dispondrá un recuento de los votos en zonas disputadas del país. El Presidente Mahmoud Ahmadinejad, que habría obtenido un 63% de los votos en las elecciones del viernes, fue declarado triunfador sobre Moussavi, que habría alcanzado el 34%. El lunes, el Presidente Barack Obama dijo estar “muy preocupado” por la violencia, pero que seguiría buscando una vía de “diplomacia directa de mano dura” con Irán. Partidarios de Moussavi también realizaron manifestaciones en París, Nueva York, Washington, y otras ciudades. Babab Talebi participó en una manifestación el lunes en Washington.
Babab Talebi dijo: “Estamos aquí para demostrar nuestra solidaridad con el pueblo de Irán, que está en las calles exigiendo que su voz sea escuchada y que se realicen nuevas elecciones. Nosotros exigimos que las elecciones realizadas el viernes pasado no sean legitimadas a través del reconocimiento por parte de los principales medios de comunicación y entidades internacionales. Queremos asegurarnos de que todos apoyemos al pueblo de Irán y a sus demandas”.