En Kansas, un activista opositor al aborto fue acusado de asesinar al Dr. George Tiller, quien era reconocido por practicar interrupciones de embarazos. A Tiller le dispararon el domingo, mientras asistía al servicio religioso de su iglesia en Wichita. La fiscal de distrito Nola Foulston afirmó que el sospechoso, Scott Roeder, no recibirá la pena de muerte.
Nola Foulston dijo: “Este no es un caso de pena de muerte. El Estado de Kansas exige que se den una serie de hechos fundamentados y circunstancias especiales, y con los hechos y circunstancias que conocemos al momento, optamos por acusarlo de homicidio calificado”.