Durante su estadía en Ghana, el Presidente y su familia visitaron el castillo de Cape Coast, una fortaleza a orillas del mar utilizada por los traficantes de esclavos a principios del siglo XVII. La que antiguamente fuera una mazmorra para esclavos es en la actualidad un monumento en homenaje a los millones de africanos condenados a la esclavitud.
El Presidente Obama dijo: “Creo que como estadounidenses y afroestadounidenses tenemos obviamente un sentido especial de que, por un lado, este lugar fue un sitio de profunda tristeza. Por otro lado, es aquí donde se inició el viaje de gran parte de la experiencia afroestadounidense”.