El debate sobre el sistema de salud en Estados Unidos es seguido de cerca en todo el mundo, especialmente en Gran Bretaña, donde los dirigentes del sector político y de la salud lanzaron una defensa enérgica del Servicio Nacional de Salud en respuesta a los ataques contra el sistema por parte de comentaristas conservadores de Estados Unidos. El Secretario de Comercio de Gran Bretaña, Lord Mandelson, describió el sistema de salud estadounidense como de segunda categoría para los pacientes que no pueden pagar un seguro de salud.
Lord Mandelson dijo: “Al defender el sistema estadounidense, están defendiendo la asistencia médica de buena calidad, de primera categoría para aquellos que pueden comprar el seguro y un sistema de muy mala calidad y de segunda categoría para aquellos que no pueden pagar el seguro”.
Muchos británicos se sorprendieron al leer un editorial reciente en el periódico estadounidense Investor’s Business Daily. El editorial decía: “Personas como el científico Stephen Hawking no tendrían ninguna oportunidad en el Reino Unido, donde el Servicio Nacional de Salud diría que la vida de este hombre brillante, debido a sus discapacidades físicas, básicamente no vale nada”.
Hawking de hecho nació en el Reino Unido y ha vivido allí toda su vida. El periódico se vio obligado a publicar una corrección. Hawking dijo: “Hoy no estaría aquí si no fuera por el Servicio Nacional de Salud”.