Ese mismo día Obama ofreció una cena a un grupo de musulmanes estadounidenses para conmemorar el mes sagrado islámico del Ramadán.
El Presidente Obama dijo: “Juntos, tenemos la responsabilidad de fomentar un compromiso fundado en el interés mutuo y el respeto mutuo. Y esa es una de mis principales obligaciones como Presidente, tanto en el país como en el exterior. Eso es fundamental para el nuevo comienzo que he procurado entre Estados Unidos y los musulmanes en todo el mundo. Y ese es un compromiso que podemos renovar una vez más durante esta época sagrada”.