Japón continúa resistiendo la presión de Estados Unidos para reubicar una base militar estadounidense en la isla de Okinawa. El gobierno japonés dijo que quiere quitar la base de la isla de Okinawa, mientras que Estados Unidos quiere mantener una base en algún otro lugar de la isla. Decenas de miles de residentes de Okinawa participaron en las actuales protestas en contra de la base. El martes, la Secretaria de Estado Hillary Clinton no logró llegar a un acuerdo en una reunión con el Ministro de Asuntos Exteriores de Japón.
La Secretaria de Estado Clinton dijo: “Estoy segura de que al final resolveremos este asunto de forma que refleje lo mejor de nuestra alianza, la fortaleza de esa alianza durante los próximos 50 años, y se obtengan las garantías de seguridad que el pueblo japonés está buscando”.
El gobierno de Obama había ejercido presión para que se tomara una decisión de inmediato con respecto a esta base, pero ahora dice que respetará el pedido de Japón de esperar hasta mayo.