Gran Bretaña está revelando un plan de austeridad hoy que incluye los mayores recortes del sector público desde la Segunda Guerra Mundial. Se recortarán más de 128.000 millones de dólares de gastos gubernamentales y al menos 500.000 empleos. En la víspera del anuncio, los sindicatos británicos llevaron a cabo una gran manifestación en el centro de Londres. El secretario general del Congreso de Sindicatos de Gran Bretaña, Brendan Barber, censuró los recortes.
Barber dijo: “Estos recortes implicarán la pérdida de más de un millón de empleos. Y seamos claros, esto no es una necesidad económica, sino una elección política por la que ellos están optando”.