Una nueva prueba de ADN indicó que un prisionero de Texas ejecutado hace diez años fue condenado sin pruebas suficientes. Según Innocence Project (Proyecto Inocencia, en español), un sólo cabello que fue utilizado como la única prueba material contra Claude Jones de hecho no le pertenecía, y podría pertenecer a la víctima del asesinato. Jones fue ejecutado el 7 de diciembre de 2000, en las últimas semanas de George W. Bush como gobernador. Innocence Project dice que los colaboradores de Bush no le informaron que Jones estaba solicitando que se realizara una prueba genética a dicho cabello. Si se hubiera realizado dicha prueba, la fiscalía no habría tenido pruebas suficientes para condenarlo en virtud de las leyes de Texas. Este caso ya había suscitado dudas en 2003, cuando un testigo clave se retractó de su afirmación de que Jones había confesado. En sus cinco años en el cargo estatal, Bush presidió más ejecuciones que cualquier otro gobernador estadounidense en la historia moderna.
Prueba de ADN genera dudas sobre culpabilidad de prisionero ejecutado en Texas
Titular12 Nov. 2010