Jerarcas militares se manifestaron contrarios a la derogación inmediata de la prohibición impuesta por el ejército a miembros homosexuales conocida como “no preguntar, no decir.” El pasado viernes, jerarcas del cuerpo de marines se presentaron ante la Comisión del Senado de Servicios Armados para presentar sus argumentos contra la derogación de dicha política antes de fin de año. El jefe de personal del ejército, el general George Casey, contradijo las declaraciones del Secretario de Defensa Robert Gates realizadas el día anterior.
El general George Casey afirmó: “‘No preguntar, no decir’ representaría un importantísimo cambio cultural y táctico en medio de una guerra. Debería ser implementado por una fuerza y por líderes exigidos por los efectos acumulativos de casi una década de guerra. Sería además implementado por una fuerza en la que un número importante de soldados perciben que la derogación tendría un impacto negativo en la eficacia, en la cohesión y en la moral de las unidades y que sería de difícil implementación.”