Ejecutivos de Goldman Sachs, la gran empresa de Wall Street beneficiaria del rescate financiero, enfrentaron el martes un duro interrogatorio sobre su papel en la crisis financiera en una audiencia del Senado. Ex funcionarios y empleados actuales de Goldman fueron interrogados sobre las agresivas prácticas de comercialización de inversiones hipotecarias que llevaron adelante al mismo tiempo que la empresa apostaba al fracaso de dichas inversiones. Durante sus comentarios de apertura, el senador Carl Levin, de Michigan, hizo referencia a documentos internos de Goldman para argumentar que la empresa había traicionado a sus clientes.
El senador Carl Levin dijo: “Los propios documentos de la compañía demuestran que mientras ésta estaba comercializando títulos valores hipotecarios de riesgo, realizaba al mismo tiempo grandes apuestas contra el mercado hipotecario de Estados Unidos. La empresa ha negado repetidamente haber hecho esas grandes apuestas, a pesar de las abrumadoras pruebas de que sí lo hicieron. ¿Por qué es importante eso? Seguramente que no hay leyes, pautas éticas o mandato moral contra las ganancias. Pero Goldman Sachs no solo ganó dinero. Se benefició al aprovecharse de las expectativas razonables de los clientes de que la empresa no vendería productos en cuyo éxito no estaba interesada”.