Un dictamen de la Corte Suprema, aprobado por cinco votos contra cuatro, establece que los presuntos delincuentes criminales deben ahora confirmar su intención de permanecer en silencio y solicitar un abogado para evitar que sus declaraciones sean utilizadas en su contra durante el juicio. En su fundamentación discrepante, la jueza Sonya Sotomayor expresó: “Existirá la presunción legal de que los sospechosos renunciaron a sus derechos, aun cuando no hayan expresado claramente su intención de hacerlo”.
Corte Suprema limita derechos de la enmienda Miranda
Titular02 Jun. 2010