El gobernador de Pensilvania, Ed Rendell, se disculpó luego de que trascendiera que su gobierno le pagó a una firma privada para que vigilara a una serie de grupos activistas locales. El Instituto de Terrorismo y Respuestas de Investigación recibió 125.000 dólares por reunir material para los boletines antiterroristas del Estado. Los boletines contenían información sobre una vigilia con velas en contra de BP, un festival de hombres y mujeres homosexuales, e incluso una concentración en respaldo de la propia campaña de Rendell para aumentar el gasto en la educación pública. La empresa también vigiló a opositores a las perforaciones en Marcellus Shale, tomando nota de sus planes para asistir a audiencias públicas y transmitir el documental Gasland. Además de los organismos encargados de la aplicación de la ley, hubo entidades privadas, como empresas de gas, que recibieron la información de inteligencia. En una conferencia de prensa, Rendell se disculpó con los grupos que fueron vigilados.
El gobernador Rendell dijo: “Pido disculpas a los manifestantes de Marcellus Shale. Pido disculpas a los manifestantes que pagan impuestos. Pido disculpas a los hombres y mujeres homosexuales del Festival del Orgullo Gay. Pido perdón a cada uno de los nombres que estaban en la lista”.
Rendell afirma que recién se enteró de la vigilancia la semana pasada, pero se rehusó a despedir al director de la Oficina de Seguridad Nacional de Pensilvania. La empresa que llevó a cabo el espionaje, el Instituto de Terrorismo y Respuestas de Investigación, tiene amplios vínculos con el gobierno israelí. En su sitio web, la compañía se promociona como una “destacada empresa de seguridad estadounidense-israelí”. El sitio también elogia el “entrenamiento al estilo israelí” y dice que todos sus cursos “están aprobados por el Ministerio de Defensa de Israel”.
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