El supercomité bipartito no logró llegar a un acuerdo para reducir el déficit federal. El lunes, demócratas y republicanos abandonaron el esfuerzo por llegar a un acuerdo radical luego de que tres meses de conversaciones no lograran superar las profundas divisiones en torno a los impuestos y el gasto. Una cláusula gatillo que impone recortes automáticos de 1,2 billones de dólares durante diez años en programas militares y nacionales entra en vigencia en 2013.
El Presidente Obama responsabilizó a los republicanos por el impasse y dijo: “Siguen insistiendo en proteger a cualquier costo las reducciones impositivas de cien mil millones de dólares para el 2% de estadounidenses más ricos, aunque eso implique reducir el déficit con grandes recortes a la educación, la investigación médica y Medicare. Por lo tanto, al menos en este punto, simplemente no se moverán de esa posición de negociación, y hasta el momento, esa negativa sigue siendo el principal obstáculo que ha impedido que el Congreso llegue a un acuerdo para reducir aún más nuestro déficit”.