Más de 10.000 manifestantes rodearon la Casa Blanca el domingo exhortando al Presidente Obama a rechazar el proyecto de oleoducto de arenas alquitranadas desde Canadá a la costa del Golfo presentado por Keystone. La manifestación tuvo lugar exactamente a un año de las elecciones de 2012. Entre los manifestantes se encontraba Carol Fisher.
Fisher declaró: “Estoy aquí porque debía hacerlo, para que mis nietos puedan decir frente a la creciente ola de degradación ambiental, parálisis política e influencia de las corporaciones en todos nuestros sistemas que había gente que decía que no, que había gente que decía ‘ya basta’ y que nuestro interés es en el futuro y en la salud de nuestro planeta, de nuestros hijos, de nuestros sistemas democráticos”.