Titulares24 de febrero de 2011

El líder libio Muammar Gaddafi continúa con la ola de violencia en procura de eliminar un levantamiento en aumento contra su gobierno. Siguen conociéndose informes sobre decenas de abusos a los derechos humanos perpetrados por las fuerzas partidarias de Gaddafi. Según se informa, un número indeterminado de personas fueron asesinadas hoy en un ataque de las fuerzas libias a una mezquita en la ciudad de Az-Zawiya. No se conoce la cifra total de fallecidos, pero el ministro de Relaciones Exteriores de Italia informó que podrían haber muerto más de 1.000 personas. Según los relatos de testigos, el aeropuesto de Trípoli fue invadido por libios que tratan desesperadamente de huir del país. La mayor parte de la zona oriental del país está bajo el control de la oposición. En el oeste de Libia, los manifestantes antigubernamentales tomaron el control de Misurata, la tercera ciudad de Libia, que se encuentra a aproximadamente 130 millas de Trípoli, la capital. En la ciudad oriental de Tubruk, los habitantes celebraron luego de tomar el control.

Un manifestante dijo: “Esta gente solo quiere ser libre. Solo quieren tener una vida normal. Solo queremos agua, electricidad, una vida normal. Queremos ir a la escuela y tener una vida normal como las personas del mundo entero. Están matando a mis hermanos y hermanas en otras ciudades, se están perpetrando masacres. Hay gente muriendo. Ayúdennos”.

El Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas se reunirá mañana en Ginebra para tratar el ataque del gobierno libio a los manifestantes. La Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Navi Pillay, renovó su llamado para que se inicie una investigación internacional del gobierno libio por “crímenes contra la humanidad”.

Navi Pillay declaró: “Preveo que es muy probable que el resultado recoja la sugerencia que hice acerca de la necesidad de una investigación internacional independiente de la violencia contra los manifestantes desarmados en Libia, que según mi opinión configura un crimen contra la humanidad”.

Estados Unidos ha recibido reclamos para imponer una zona de exclusión aérea sobre Trípoli y que reinstaurar las sanciones contra el gobierno libio. En Washington, el Presidente Obama dijo que está estudiando diversas opciones y calificó a la violencia de “inaceptable”.

El Presidente Obama expresó: “El sufrimiento y el derramamiento de sangre es indignante e inaceptable. Igualmente lo son las amenazas y órdenes de disparar contra los manifestantes pacíficos y seguir castigando al pueblo de Libia. Estas acciones violan el derecho internacional y toda norma de decencia básica. Esta violencia debe cesar. El mundo entero está observando, y coordinaremos con la comunidad internacional nuestra asistencia y las medidas para hacer rendir cuentas a los responsables”.

Un tribunal británico dictaminó que Julian Assange, fundador de WikiLeaks, debe ser extraditado a Suecia para ser interrogado sobre las acusaciones en su contra de violación y agresión sexual. Assange se está oponiendo a la extradición desde que en diciembre fuera arrestado durante nueve días en una cárcel de Londres. Sus abogados defensores fundamentaron su oposición a la extradición basándose en la posibilidad de que el acusado pudiera terminar siendo enviado a Estados Unidos para ser condenado a muerte allí por publicar documentos gubernamentales clasificados. Assange dijo que va a apelar el fallo del tribunal.

El ejército de Estados Unidos es acusado de ordenar ilegalmente la realización de una campaña de “operaciones psicológicas” para convencer a miembros del Senado de aumentar su respaldo a la guerra en Afganistán. Según la revista Rolling Stone, miembros de una unidad militar en Afganistán recibieron instrucciones de utilizar tácticas psicológicas desplegadas en la guerra para manipular a senadores y otros dignatarios que visiten el país. La orden fue dada por el teniente general William Caldwell, que supervisa el entrenamiento militar de las tropas afganas. Entre las personas elegidas se encuentran John McCain, Joe Lieberman, Jack Reed, Al Franken y Carl Levin; el almirante Mike Mullen, del Estado Mayor Conjunto, y una serie de legisladores, funcionarios extranjeros y analistas. El líder de la unidad, teniente coronel Michael Holmes, dice que le ordenaron detectar “puntos de presión que pudiera usar para ejercer influencia en la delegación [visitante] para obtener más fondos”. Holmes añadió que también se le pidió que considerara: “¿Cómo hacemos para que estos tipos nos manden más gente? ¿Qué tenemos que implantarles dentro de la cabeza?” Holmes dice que fue objeto de represalias tras resistirse a las exigencias de Caldwell por considerarlas violatorias de las leyes de Estados Unidos.

Continúan las protestas en Wisconsin contra la iniciativa del gobernador Scott Walker de eliminar los derechos de negociación colectiva de los empleados públicos. Walker busca cada vez más el respaldo de otros estados e insta a los dirigentes de Michigan y Florida a que invoquen penurias presupuestarias para arrancar concesiones de los trabajadores públicos. Mientras tanto en Ohio, los senadores republicanos de ese estado propusieron modificar un proyecto de ley para permitir a los empleados estatales sindicalizados que negocien colectivamente sus salarios. Un proyecto de ley que restringiría esos derechos motivó que esta semana se congregaran miles de personas en la sede del gobierno estatal en Columbus. Según una reciente encuesta de Gallup, un 61% de los estadounidenses se opone a despojar a los sindicatos de los derechos de negociación colectiva, y tan sólo un 33% está a favor.

El gobernador Walker fue víctima de una broma el miércoles por parte de un blogger que se hizo pasar por el multimillonario de derecha David Koch. Este blogger, Ian Murphy, mantuvo una conversación telefónica grabada de 20 minutos de duración con Walker. Murphy, haciéndose pasar por Koch, le ofreció ayuda a Walker para poner buscapleitos en las manifestaciones.

Ian Murphy, haciéndose pasar por David Koch: “Vamos a apoyarte de todas las formas que podamos. Pero estábamos pensando en colocar buscapleitos entre la multitud”.

Gobernador Scott Walker: “Usted sabe, bueno, el único problema, porque ya lo hemos pensado, el problema, o mi reacción instintiva a eso en este momento, sería que los legisladores con los que he hablado ya están completamente cansados de eso. A la población realmente no le gusta esto. Mi único temor sería, si se arma algún alboroto, es que eso asuste a la población y que piense que quizá el gobernador debería llegar a un acuerdo para evitar todos estos problemas”.

Un alto funcionario estatal de Indiana fue destituido tras convocar públicamente a la violencia contra los manifestantes en el capitolio de Wisconsin. En comentarios publicados en su cuenta de Twitter, el fiscal general adjunto de Indiana Jeff Cox pidió que se usaran “municiones reales” para dispersar a la multitud. Al ser presionado por un periodista de Mother Jones, Cox defendió su comentario, alegando que estaba justificado “contra matones que amenazan físicamente al gobernador y a los legisladores estatales legalmente electos”. Cox agregó: “Por supuesto que defiendo la fuerza letal”.

El gobierno de Obama dejó de apoyar la Ley de Defensa del Matrimonio (DOMA, por su sigla en inglés) de 1996, que rechaza el reconocimiento federal del matrimonio homosexual. El martes, la Casa Blanca dijo que ya no defendería la medida en dos demandas en curso contra la misma. Esta ley es la última ley federal fundamental que abiertamente ataca a los homosexuales, tras la revocación del año pasado de la política “no preguntar, no decir” contra los homosexuales en las Fuerzas Armadas. El gobierno previamente había afirmado que se oponía a la DOMA, pero que estaba obligado a defenderla por tratarse de una ley federal en vigor.

Las Fuerzas Armadas estadounidenses anunciaron el juicio ante un consejo de guerra de un soldado acusado de asesinar a un civil afgano el año pasado. El sargento Derrick Miller es acusado de asesinar a balazos en la cabeza a Atta Mohammed tras sacarlo de su casa y golpearlo. El hijo de Atta Mohammed, Yar Mohammed, describió el ataque contra su padre.

Yar Mohammed declaró: “Un soldado estadounidense se lo llevó de casa al baño. Solo Dios sabe lo que sucedió dentro del baño, pero hubo signos claros de que recibió puñetazos en el rostro y su ropa estaba hecha pedazos. Le dispararon en la cabeza con una pistola. Exigimos su juicio. Nos aseguraron que está en prisión y que se llevaría el caso a tribunales. Queremos que sea castigado por el crimen que cometió, debe ser castigado”.

Nadir Nadiry de la Comisión Independiente de Derechos Humanos afgana elogió el consejo de guerra, pero dijo que muchos asesinatos de civiles afganos quedaron impunes.

Nadir Nadiry dijo: “Estamos muy felices de que se haya lanzado una investigación penal tras el incidente y de que el caso se haya tenido en cuenta y haya comenzado un proceso de responsabilidad. Estamos siguiendo de cerca el proceso del juicio y esperamos que no se deje de tener en cuenta ningún delito. Aún nos preocupa mucho, nos preocupa seriamente, el alto número de civiles asesinados en este conflicto en el año que transcurrió. El número total de más de 2300 civiles perdieron la vida”.

Nuevas cifras indican que la membresía en grupos extremistas en contra del gobierno alcanzó niveles récord. Según el Centro Legal para la Pobreza del Sur (Southern Poverty Law Center), los grupos “patriotas” en contra del gobierno y las milicias crecieron un 61 por ciento en 2010 luego de triplicarse el año anterior. El número de grupos de odio activos superó los mil, un aumento del 7,5 por ciento por primera vez desde que este Centro comenzó a llevar registros a principios de la década del 80.

Dos residentes blancos de Pensilvania fueron condenados a nueve años de prisión cada uno por la muerte a golpes de un inmigrante mexicano en el año 2008. Brandon Piekarsky y Derrick Donchak fueron declarados culpables de cometer un crimen de odio cuando ellos y otras cuatro personas golpearon a Luis Ramírez en la localidad de Shenandoah. Los testigos dicen que los agresores golpearon brutalmente a Ramírez mientras le gritaban insultos de tono racista. Piekarsky y Derrick Donchak podrían haber sido condenados hasta a cadena perpetua.