Japón enfrenta crecientes temores de que la radioactividad procedente de la planta nuclear afectada por el terremoto haya contaminado los alimentos y el agua. Funcionarios japoneses afirman que descubrieron radioactividad por encima de los niveles permitidos en verduras cerca de las instalaciones de Fukushima Daiichi, así como en el agua de la planta purificadora de Tokio. El gobierno japonés advirtió a los habitantes de Tokio que no ingirieran verduras y que no dieran agua del grifo a los bebés. La advertencia se produce al tiempo que los trabajos de emergencia en la planta Daiichi fueron interrumpidos hoy luego de que comenzara a elevarse humo. Por segunda vez en tres días, los trabajadores fueron evacuados. James Lyons, del Organismo Internacional de Energía Atómica, dijo que todavía no se sabe dónde está exactamente la fuente de la radiación que se filtra de la planta.
Lyons declaró: “Seguimos viendo que sale radiación del sitio y la pregunta es de dónde proviene exactamente, si de las unidades de los reactores, las estructuras principales de contención o las barras agotadas de combustible. Por lo tanto, sin poder ir hasta allí y husmear de verdad es difícil determinar de dónde proviene”.
El gobierno japonés dice que en el terremoto y tsunami murieron más de 9.300 personas y que hay 13.786 desaparecidos. La estimación de los daños ascendió a más de 309 mil millones de dólares.