Las fuerzas de la OTAN bombardearon una oficina dentro del complejo del líder libio Muammar Gaddafi esta mañana, en lo que los funcionarios libios describieron como un intento de asesinato. Según se informa, 45 personas habrían resultado heridas en el ataque, de las cuales 15 estarían graves. El ataque se produjo al tiempo que dos destacados senadores republicanos, Lindsey Graham y John McCain, exhortaron al gobierno de Obama a escalar las operaciones en Libia. McCain hizo declaraciones el domingo, tras regresar de Libia.
El senador John McCain declaró: “Es una situación muy complicada y todo indica que está en un impasse. Esperamos que Gaddafi caiga desde adentro, pero la esperanza no es una estrategia, y es obvio que, a pesar de que me alegro de ver que ahora el 'Predator' está en combate, Estados Unidos debe jugar un rol más importante en las operaciones aéreas”.