Mientras tanto, Naciones Unidas advierte que están escaseando los alimentos, el agua y otros suministros básicos en algunos lugares de Libia.
Valerie Amos, jefa de la ayuda humanitaria de las Naciones Unidas, declaró: “La escasez extendida está paralizando el país de maneras que impactarán gravemente a la población en general en los meses que vendrán, particularmente a los más pobres y vulnerables. Todavía no tenemos una cifra exacta del número total de bajas desde el comienzo de la crisis. Cuánto más se prolongue la situación actual, más grave será la situación humanitaria. Con esto en mente, las Naciones Unidas establecieron presencia humanitaria en Benghazi y Trípoli”.