Las tropas israelíes mataron a tiros a por lo menos trece palestinos e hirieron a centenares más el domingo cuando refugiados de esa nacionalidad procedentes de Siria, Jordania y el Líbano, así como residentes de Gaza, trataron de ingresar a Israel por diversos puntos de la frontera. Hasta 300 personas procedentes de Siria desbordaron a las patrullas fronterizas y entraron por un breve lapso a Israel. La protesta masiva se produjo el día conocido como “Nakba”, ocasión en que los palestinos recuerdan la fundación de Israel en 1948. El Líbano, Siria y Jordania albergan a centenares de miles de refugiados palestinos que llegaron a esos países cuando ese año fueron obligados a abandonar sus hogares. El Presidente palestino Mahmoud Abbas dijo que los palestinos asesinados el domingo debían ser recordados como mártires.
Mahmoud Abbas declaró: “Pido a Dios que salve las almas de los mártires que cayeron hoy a manos de los soldados de la ocupación israelí mientras se encontraban en una manifestación que conmemoraba la Nakba dentro del país, en Cisjordania, Jerusalén, la Franja de Gaza y las fronteras siria y libanesa. Su preciosa sangre no habrá sido derramada en vano porque lo fue por la liberación y derechos de nuestro pueblo palestino”.