En noticias de Siria, funcionarios de las Naciones Unidas dicen que la norteña ciudad de Jisr al Shugour está casi desierta tras la represión de las fuerzas de seguridad del país. Durante las dos últimas semanas, de 500 a mil personas han cruzado diariamente la frontera en dirección a Turquía.
La representante de Turquía en la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Carol Batchelor, declaró: “En las conversaciones que mantuvimos con personas de estos dos lugares pudimos ver que había un gran nivel de temor. La gente está profundamente traumatizada, por lo que va a llevar algún tiempo restablecer la confianza. Se supo que alguna gente había vuelto y hay una gran preocupación con respecto a lo que puede haberle sucedido. Así que hasta que se puedan abordar estos problemas con claridad, puede ser difícil que la gente empiece a volver, en cualquier número que sea y de una manera sostenible”.
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